Granada de mano ofensiva de origen francés, adoptada por el ejército español en 1921.

Funciona por impacto, con un seguro de distancia para evitar que explote accidentalmente demasiado cerca del tirador.

Fue utilizada muy ampliamente durante la Guerra Civil Española, especialmente en el bando sublevado. Al parecer su funcionamiento no era demasiado bueno, produciéndose muchos fallos, pero al ser su coste ridículo estuvo en producción durante toda la guerra por ambos bandos.

Su construcción es exactamente la misma que las latas de conservas, pero en lleva un tapón roscado en un extremo y dos en el otro. En el lateral hay un gran agujero oval unido a 2 chapas que conforman una especie de embudo atravesado por dos tubos que comunican con los tapones pequeños de las tapas. 4 pequeños trozos de chapa soldados sirven para sujetar la chapa del seguro con un pasador/anilla de alambre.

Los esquemas de esta página provienen de un manual de posguerra (con bombeta en la chapa de seguridad) y del "Anexo VIII del reglamento para la instrucción de tiro con armas portátiles" de 1921 (Chapa con estrella de cinco puntas)

Según la disponibilidad de medios, se hicieron granadas con hojalata reciclada (algunos seguros todavía tienen en la parte interna el dibujo de latas de aceitunas) el percutor es un tubo de latón que guia el muelle con una aguja de bronce remachada en un extremo, pero se encuentran algunos con la punta de acero, totalmente en fundición de cinc, e incluso cartuchos a los que se remacha la aguja en el agujero del pistón. La masa o contrapeso es de chapa rellena de bolas de plomo, pero también las hay de chapa con plomo macizo y de plomo macizo sin chapa. Normalmente ambas tapas están unidas al cuerpo por plegado con una máquina especial, pero cuando no la había se usaban tapas de mayor diámetro soldadas. También las hay con los caballetes por los que pasa el alambre de seguro de chapa o de alambre, dos tipos de cebo multiplicador. E incluso, excepcionalmente, algunas llevan partes de latón. Las chapas del seguro tienen una marca para indicar dónde se debe apoyar el dedo para manejarla con seguridad. Lo habitual es que esta marca sea una bombeta de artillería, pero también las hay con una estrella de 5 puntas o una cruz griega.

A la izquierda, foto que publiqué en Facebook con todas las piezas de una granada lafitte salvo la lata que las contiene, la anilla de seguro y la cinta que ejerce de seguro de distancia.

Para lanzarla, se extrae el seguro con lo que la chapa 1 queda libre. Al lanzarla se desenrolla una cinta que está atada al agujero pequeño de la chapa 1 y al caballete 7 que entra en el contenedor del mecanismo 5 manteniendo bloqueado el percutor 8. Al acabarse la cinta, caen la chapa 1, el caballete 7 y la chapa 6 que mantiene en su lugar el contrapeso 11 que está en la parte gruesa del embudo del contenedor (5) y bloquea el percutor por el otro lado. A partir de este momento, el mas leve golpe hace que el contrapeso 11 se mueva liberando el percutor 8, que por la fuerza del muelle 9 impacta en el fulminante 10 produciendo la explosión de la carga.

En la imágen hay 4 modelos distinos de contrapeso 11 (de plomo y de chapa rellena de perdigones de plomo), dos de fulminante 10 (abierto por un extremo y estanco), dos de percutor 8 (todo de latón y de latón con percutor de acero pero también los hay totalmente en fundición de cinc y otros hechos con una vaina de 7x57con la boca ensanchada y una aguja de latón o hierro remachada en el lugar del pistón). 2 es el tapón por donde se introduce la carga, 3 el tapón por donde se introduce el conjunto muelle-percutor y 4 es el tapón -siempre pintado de amarillo- por donde se introduce el fulminante cuando se prevee usar la granada en breve.

Estas granadas se utilizaron en gran escala y muchas de ellas fallaron. Al ser de hojalata, no compensaba su recogida para reciclar y todavía se encuentran en abundancia por las zonas que fueron frente de guerra aunque generalmente muy corroídas. En algunas explotó el cebo pero no la carga y tienen reventado el tubo que lo contenía, otras explotaron mal y está deformadas, algunas se lanzaron sin cebo por error (por seguridad, éste se introducía en la granada sólo en el momento de ir a utilizarse) y muchas simplemente fallaron.

El explosivo principal ha desaparecido por efecto de las lluvias en casi todos los casos, pero el cebo multiplicador no y todavía puede ser peligroso. PRECAUCIÓN siempre si encuentra alguna.

(Todas las imágenes de esta web, salvo raras excepciones, pueden verse ampliadas haciendo clic sobre ellas para ver los detalles)

Excepcionalmente -generalmente si estaban entre pinaza- se conservan partes de la cinta. Esta era de unos 2.4-2.5 mm de ancho y según parece se utilizaba la que hubiese disponible pues como puede verse en estas fotos los tejidos son diversos.

Las chapas de seguridad, fácilmente reconocibles, se encuentran a cientos en zonas de combate. Detalle de una con la cruz griega, otra ordinaria con la bombeta de artillería y una que conserva restos de pintura, rayada durante algún rato de aburrimiento en las trincheras.

Distintas granadas lafitte tal como suelen aparecer. Es frecuente que los tapones se caigan, especialmente los dos pequeños debido a la fuerza ejercida por el muelle durante años. Las dos de la izquierda son el modelo habitual, con las tapas unidas al cuerpo doblando los bordes como cualquier conserva. Una de ellas conserva todavía parte de la pintura original, gris-azulada. Las otras tres son más raras: las tapas, de mayor diámetro, están unidas por soldadura -supongo que por no disponer de maquinaria- y de éstas dos tienen los 4 ojales por los que pasa el alambre de seguro en alambre soldado en lugar de chapa. A la última se le vé parte del percutor, de fundición de cinc en lugar de latón.

En la tapa por la que se introduce el cebo-multiplicador suelen ir grabadas las siglas del fabricante o, más raramente, el escudo del arma que lo adquirió antes de la guerra. Dos marcajes distintos y una sin ningún marcaje. Incluso las de tapa soldada, que parece que correspondan a granadas fabricadas con pocos medios pueden tener marcaje como la del centro.

Seguro o contrapeso de los dos modelos más frecuentes: de chapa rellena de perdigones de plomo (este ejemplar se conserva excepcionalmente bien) y de plomo macizo.

G053: Granada de mano ofensiva Lafitte 1921. Apareció 79 años después de haberse perdido pero en un pinar, por lo que conserva abundantes restos de pintura gris-azulada (especialmente en las partes no visibles) Alambre de seguro y cinta son copia. El tapón de mayor diámetro es para la carga, el pequeño que está a su lado es por el que se introduce muelle y percutor. En la cara opuesta, un único tapón pequeño por el que se introduce el cebo multiplicador (en este caso no llegaron a instalarlo) Puede que este ejemplar no tuviese el tapón del cebo pintado de amarillo. Según me dicen las granadas pintadas de color arena llevan siempre el tapón amarillo, mientras que las azules algunas si y otras no.

Ejemplar utilizado en la Guerra Civil Española